El colchón de un bebé siempre tiene que estar en perfectas condiciones para evitar que pueda sufrir algún tipo de enfermedad. Hay que tener en cuenta que un bebé pasa durmiendo muchas horas, por lo que la higiene del colchón de cuna debe ser siempre importante.
Para que te sea más fácil mantener el colchón en perfectas condiciones es importante que lo mantengamos en buenas condiciones, ya que siempre puede haber fugas, concentración de ácaros o polvo… vamos que hay que mantenerlo limpio con regularidad para que el bebé esté sobre una zona cómoda y limpia.
Para que el bebé pueda estar lo más a gusto posible durante los primeros meses de vida, es importante que le ofrezcamos uno de los mejores cochones de cuna.
También es importante que cubrir el colchón con una funda de protección para evitar que se pueda manchar o mojar con facilidad. Hay que tener en cuenta que el bebé es fácil que manche el colchón, lo que quiere decir que es importante tomar medidas de protección para evitar que el colchón se ensucie porque luego será mucho más complicado de limpiar. Para evitar problemas, te invito a tener dos fundas de protección. Así mientras estás lavando una podrás tener otra y conseguir que tu bebé siga disfrutando de su descanso.
Es muy importante que tengas en cuenta que el polvo se puede concentrar con el tiempo en el colchón. Por este motivo te recomiendo aspirar con una aspiradora potente el colchón cada mes más o menos. Así te asegurarás de que el polvo y los ácaros no se concentran en el colchón y en consecuencia la limpieza es la adecuada. Recuerda hay que aspirarlo por los dos lados. Si tienes el colchón limpio de polvo, la probabilidad de que el bebé desarrolle alergias será mucho más baja.
También es importante lavar el colchón para eliminar las impurezas que pueda tener y para dejarlo como nuevo en caso de ser necesario. Para limpiarlo te recomiendo usar detergente en polvo sin poder blanqueante con agua caliente. Una cucharada por cada cinco tazas de agua más o menos. Humedecemos el paño limpio y frotamos sobre el colchón. En general o sobre la zona que ha manchado el bebé para limpiarla más a fondo. Es importante que no mojes demasiado el colchón o tendrás problemas a la hora de secar el colchón. Haz lo mismo con las dos caras del colchón, teniendo en cuenta que al darle la vuelta puede que se moje el suelo. Si es necesario, pon toallas para que no se moje el suelo y se dañe.
Si hay manchas que no salen, puede ser una buena opción limpiar con jugo de limón. Solo hay que aplicar ligeramente en la zona y evitar aplicar demasiado zumo en la zona porque luego puede haber problemas a la hora de eliminarlo.
Cuando tengas el colchón limpio, notarás que está húmedo. Es normal, es el momento de secarlo antes de ponerlo en la cuna para que pueda dormir el bebé. La opción más natural es sacarlo al balcón y dejar que el sol haga su función. Dependiendo de cuanto lo hayas mojado, tardará más o menos en secarse. Recuerda, el sol también te ayudará a eliminar las manchas del colchón, de aquí que sea nuestro gran aliado, sobre todo si hemos apostado por la opción del limón. Se ha demostrado que el jugo de limón y la luz solar ayudan a blanquear las cosas de una manera natural, de aquí que sea interesante secar el colchón al sol.
Si no hace calor y el sol no puede secar el colchón, te recomiendo poner el colchón en una zona seca y fresca y en una zona que esté bien ventilada. Con la ayuda de un ventilador podrás conseguir que el secado sea más rápido. También puedes servirte de la ayuda de un secador para conseguir que los resultados sean más rápidos.
Los expertos recomiendan que una vez que el colchón está seco se ponga bicarbonato espolvoreado sobre el colchón. Se debe dejar actuar durante un par de horas y posteriormente se pasa de nuevo la aspiradora para dejarlo en perfectas condiciones para el bebé. El objetivo del bicarbonato es eliminar cualquier olor que pueda haber quedado en el colchón y que no ha sido eliminado por la limpieza que hemos realizado.
Recuerda, es muy importante asegurarnos que el colchón está limpio y completamente seco antes de dejar a nuestro bebé dormir de nuevo en su colchón. Si cometes el error de hacer que el bebé duerma sobre un colchón húmedo, lo que estamos haciendo es que la probabilidad de que nuestro hijo enferme sea muy grande, de aquí la importancia de que el colchón esté en perfectas condiciones. Por supuesto, el bebé con humedad no se sentirá a gusto y en consecuencia no descansará correctamente.
Lo importante es mantener una buena higiene para que el bebé pueda descansar y desarrollarse adecuadamente. Y si ves que las fugas son continuas, la protección del edredón será muy importante. Si no la tienes, te invito a comprar cuanto antes una funda para no tener que estar constantemente el colchón.