Los irrigadores dentales son sin duda la herramienta de higiene bucal perfecta para cuidar al máximo tu salud dental y terminar con las impurezas en tu boca complementando a la perfección tu higiene dental diaria. Si quieres saber cómo limpiar un irrigador dental para complementar a la perfección el cepillado diario a continuación presentamos los mejores tips y consejos para desinfectar correctamente un irrigador dental.
Escoge la frecuencia perfecta
El primero de los puntos que debes tener en cuenta para desinfectar correctamente un irrigador dental será cada cuanto tiempo vamos a tener que realizar esta limpieza. Los expertos recomiendan limpiar el irrigador como mínimo cada mes o cada mes y medio si queremos que nuestro dispositivo permanezca libre de bacterias y de residuos de todo tipo. Ahora bien, es importante cuidar el irrigador todos los días con un sencillo mantenimiento si queremos conseguir mantenerlo en un óptimo estado.
Elige las herramientas adecuadas
Si bien un irrigador es una alternativa ideal para cuidar tu higiene dental al máximo complementando al cepillado diario es importante que tengas en cuenta que el agua tiene muchos minerales que normalmente se irán acumulando en los depósitos y los conductos de tu irrigador bucal. Es por ello que necesitarás realizar un mantenimiento periódico de este dispositivo para mantenerlo en óptimas condiciones, evitar que deje de ser eficaz, que pueda provocarte alguna infección u enfermedad o que directamente se rompa.
Para desinfectar y limpiar correctamente tu irrigador dental vas a necesitar vinagre, agua, una esponja y jabón lavaplatos. Puedes usar otro tipo de productos e incluso limpiar el irrigador en el lavavajillas pero esta alternativa será más que suficiente para desinfectar de forma eficiente tu irrigador y poder usarlo con garantías durante mucho tiempo. Los productos que se necesitan para limpiar correctamente un irrigador dental suelen estar en todos los hogares con lo que no supondrán un gasto extra para ninguna familia ni particular.
Desinfecta el irrigador dental
A partir de aquí, cuando cuentes con todo el material necesario para limpiar a la perfección y desinfectar tu irrigador dental para poder seguir usándolo cómodamente ya podrás empezar con el proceso. Los expertos recomiendan realizar este procedimiento al menos una vez al mes y por supuesto enjuagar bien y dejar bien seco el irrigador después de cada uso.
Para desinfectar tu irrigador dental a la perfección lo primero que tienes que hacer es desmontar su depósito de agua. Si cuenta con una válvula retírala con cuidado para no romperla y límpiala bien a fondo frotando con tus manos bajo el agua del grifo para conseguir un óptimo resultado de limpieza e higiene. Cuando ya hayas logrado retirar de forma sencilla el depósito podrás lavarlo sin problemas en la bandeja de arriba del lavavajillas si es que cuentas con uno. Si no tienes lavavajillas no te preocupes porque puedes hacerlo igualmente con la esponja y con el jabón como presentábamos en el anterior punto cuando hablábamos de las herramientas de limpieza.
Limpia el irrigador por dentro
Para conseguir dejar tu irrigador especialmente limpio y desinfectarlo a la perfección es muy importante que limpies las piezas de dentro del aparato porque es en este espacio dónde suele acumularse la mayor cantidad de cal y de bacterias. Para ello los expertos recomiendan que llenes el depósito utilizando una mezcla de entre dos y cuatro cucharadas de vinagre blanco mezclado siempre con medio litro de agua del grifo. Después pon en marcha el irrigador con esta mezcla dentro y haz que funcione hasta que llegue a la mitad de dicha mezcla y a continuación apágalo.
De esta forma conseguirás limpiarlo mejor ya que la mezcla limpiará todos los tubos del irrigador y después te recomendamos ubicarlo en el fregadero para que la manguera drene durante unos veinte minutos hasta que todo este producto haga efecto dentro del irrigador y así consigas desinfectarlo a la perfección.
Cuando ya hayas seguido estos pasos podrás encender tu irrigador para conseguir vaciar toda la mezcla y después enjuagarla utilizando un depósito entero de agua tibia volviéndolo a poner a funcionar para poder eliminar por completo el vinagre que hayas aplicado con anterioridad para limpiarlo.
Enjabona tu dispositivo
También nos parece especialmente importante el enjabonar todo el tanque para poder eliminar todas las manchas y restos de suciedad con las que pueda contar. Piensa que si el mango o las boquillas tienen algún resto que la boquilla no vaya a poder eliminar siempre vas a poder aplicar algo de jabón para limpiar mejor tu irrigador. Además, si alguna de las partes de tu irrigador dental tiene una mancha complicada podrás sumergirlo en una solución especial con agua tibia y lavaplatos durante unos quince minutos y de esta forma conseguirás un dispositivo mucho más limpio e higiénico en poco tiempo.
Limpia las boquillas
El siguiente paso para continuar desinfectando a la perfección un irrigador dental pasa por limpiar bien las boquillas. Para la limpieza de las boquillas y cabezales bastará con sumergirlas durante unos cinco minutos en vinagre blanco y después en enjuagarlas usando agua tibia en el mismo irrigador. Recomendamos cambiar las boquillas cada tres o seis meses para que éstas no se atasquen y puedan llegar a perjudicar al rendimiento del irrigador porque siempre será mejor prevenir este tipo de contratiempos antes que tener que cambiar el irrigador al completo.
Limpia el mango del irrigador
Por último es fundamental limpiar también el mango del irrigador. Para ello se debe proceder igual que con las boquillas. Es decir, recomendamos sumergir el mango del irrigador en vinagre y enjuagarlo con agua de forma sencilla para mantener tu irrigador en óptimas condiciones. Los profesionales recomiendan seguir todos estos pasos en lugar de limpiar el irrigador de forma general ya que de esta manera nos aseguraremos de conseguir unos resultados más eficaces y de lograr desinfectar correctamente un irrigador dental.
Si lo prefieres también puedes limpiar las boquillas y el mango directamente dentro del tanque usando vinagre y aprovechando el producto para limpiar a la perfección todo el irrigador. El vinagre es un ingrediente muy efectivo para eliminar microbios y bacterias de forma sencilla y eliminará por completo la cal, uno de los agentes que suelen dañar en mayor medida los irrigadores dentales.
Últimos cuidados para tu irrigador dental
Sin duda para conseguir que un irrigador dental pueda limpiar por completo nuestra boca y nuestras encías es muy importante que se encuentre completamente libre de bacterias y de cal. En caso contrario los residuos que se encuentren dentro del irrigador podrán provocar que este dispositivo empiece a hacer más ruido, que se averíe con facilidad e incluso que se obstruyan sus tubos y canales internos, pero para ello es fundamental realizar una limpieza periódica de calidad, segura, eficiente y adaptada a cada dispositivo.
En conclusión, para mantener un irrigador dental bien limpio y con un rendimiento óptimo durante mucho tiempo no vas a tener que invertir mucho tiempo ni dinero y además es una práctica bien sencilla. Es por ello que recomendamos usarlo siempre teniendo muy en cuenta las instrucciones de los fabricantes de cada tipo de irrigador para poder adaptarnos a las recomendaciones concretas de cada modelo y evitar así cualquier tipo de avería o accidente que pudiera afectar al irrigador dental.