A todo el mundo le gusta tener cristales y ventanas en casa para disfrutar de una mayor iluminación natural. Pero el problema viene dado cuando tenemos que limpiarlos. Seguro que en más de una ocasión los has intentado limpiar y te has dado cuenta de que no quedan perfecto. Siempre quedan manchas o movimientos del trapo que hacen que el cristal no quede todo lo bien que se buscaba. Pero aquí estamos para ayudarte, con la mano de nuestra experta en limpieza te vamos a mostrar una serie de trucos. Con ellos te será más fácil conseguir el cristal perfecto.
¿Cuándo hay que limpiar los cristales?
En realidad, se pueden limpiar en cualquier momento, pero nuestra experta nos ha comentado que el mejor momento para realizar la limpieza de los cristales es durante el día, concretamente durante un día nublado. Por supuesto, no hay que limpiarlos antes de que llueva porque entonces el trabajo no habrá servido para nada.
El objetivo de limpiar los cristales en un día nublado es conseguir que el cristal no se seque demasiado rápido y en consecuencia nos sea más fácil conseguir la limpieza adecuado. Si se secan muy rápido, la mancha quedará reflejada y nos tocará volver a realizar a limpieza. Además, en un día nublado nos es más fácil ver los errores de la limpieza, lo que hace que sea el momento idóneo para conseguir los objetivos marcados.
¿Qué se puede usar para limpiar los cristales?
Muchas personas piensan que las únicas opciones para limpiar los cristales correctamente son las que se venden en los supermercados o en las droguerías. Pero eso no es así, hay que saber que también hay remedios naturales. Esos remedios harán que el cristal quede en perfectas condiciones mientras ahorramos dinero.
Una de las mejores opciones es usar vinagre. Hemos podido comprobar que el vinagre blanco nos ayuda a conseguir muy buenos resultados, siempre y cuando se use con un vaporizador o con una mezcla de cuatro partes de agua, una de vinagre y otra de bicarbonato. Esta última es opción, pero ayuda a que los resultados sean de más calidad.
Otra opción puede ser la de realizar la limpieza de los cristales con amoniaco y agua a partes iguales. El problema de esta mezcla es que el olor es bastante potente, es decir, no todo el mundo puede realizar la limpieza con este remedio. Si la haces, no te olvides ventilar la estancia para evitar intoxicaciones.
Otra opción es la de mezclar agua con un chorro de jabón de lavavajillas. También se puede cambiar por alcohol si nuestro objetivo es eliminar con más facilidad las huellas dactilares que han quedado marcados en el cristal. Con esa fórmula limpiar el cristal es muy sencillo, sin olvidar que siempre estaremos usando productos naturales. Eso ayuda a ahorrar en la cesta de la compra.
Además, necesitarás una rasqueta de goma y una bayeta para atrapar el polvo y conseguir que el cristal quede perfecto.
Cómo limpiar los cristales de una puerta de cristal
A la hora de limpiar una puerta de cristal es importante seguir una serie de pasos. En la actualidad hay muchas variedades de puertas de cristal como vemos en MetalBlinds. Independientemente de la puerta de cristal que tengamos instalada en nuestra empresa o casa, lo importante es conseguir que la limpieza sea profesional. Así se evitará tener la sensación de que la puerta siempre está sucia. Como nos indican en MetalBlinds, hay cristales que son más resistentes a los dedazos. Puedes optar por ese tipo de puertas, sobre todo si por ellas va a pasar mucha gente.
Para realizar una limpieza profesional de la puerta te recomiendo seguir los siguientes pasos:
- Protege el suelo: para evitar ensuciar el suelo, te recomiendo poner una toalla o sábana en el suelo. Así el agua y la suciedad que caigan al suelo no ensuciarán el suelo. Es un pequeño detalle que te permitirá conseguir que la limpieza sea mucho más rápida.
- De arriba a abajo: como nos informa la experta en limpieza, es fundamental realizar siempre el mismo movimiento. Y el que mejores resultados ofrece es el movimiento de arriba abajo. El objetivo es evitar que el agua pueda chorrear y se queden marcadas las gotas donde no has limpiado correctamente y se ha secado antes de tiempo.
- Rocía directamente: para que el cristal quede perfecto, te recomiendo limpiarlo un día nublado y rociar directamente. De esta manera se consigue que la limpieza sea más rápida y directa. Puedes usar líquido especial para limpiar la puerta de cristal o uno de los remedios caseros que te hemos mostrado anteriormente. Se puede poner la fórmula directamente en el paño, pero nuestra experta nos recomienda la aplicación a través de spray.
- Raqueta: el siguiente paso es el de pasar la rasqueta para conseguir que la limpieza sea profesional. Si todavía no dispones de ella, te recomiendo tenerla en tu poder lo antes posible. Sino te será mucho más fácil conseguir que los resultados sean profesionales.
- Cambio de movimientos: para evitar que el crista quede con marcas, nuestra experta nos recomienda realizar diferentes movimientos dentro y fuera. Así podrás ver que parte es la que está sucia y en consecuencia te podrás centrar especialmente en ella. Por ejemplo, el interior lo puedes limpiar de manera horizontal y el exterior de manera vertical. Con cuidado de que no queden rastro de gotas. Recuerda, los movimientos siempre deben realizarse de arriba hacia abajo.
- Secado: el secado es fundamental para obtener unos buenos resultados. Te recomiendo usar un trapo que no suele pelusas. Así el secado será optimo y el cristal siempre quedará en perfectas condiciones.
Un truco que nos ha dado nuestra experta para limpiar la puerta de cristal cuando está muy sucio es usar una patata o cebolla. Solo hay que cortarla por la mitad y frotar con suavidad por la zona con más suciedad. Luego hay que aclarar con un poco de agua y vinagre y secar. Así la suciedad saldrá con mucha más facilidad y la puerta quedará perfecta.